No es en vano cierto pasajes por Instituciones donde lamentablemente prima el servicio a la autoridad y no a los requerimientos ciudadanos. Áreas como departamentos de Talento Humano en el ojo del huracán, ante los cambios de autoridades, se va uno y viene otro con más furia que nunca, en una vorágine de pasiones que arrasó como tsunami a todo un departamento de talento humano, que lo único que hacía era un trabajo de alto nivel técnico. El peligro: los ladrones siguen ahí, con cuello y corbata. El desempleo y su hoguera consume, el desempleo y la rabia contenida afectan la salud. Tiempo de virar la página, que la justicia divina, hará lo propio.